Uno de los comercios con más tradición en la capital salmantina, Aniano, se muda en la calle Cristo de los Milagros. Su nuevo emplazamiento pone a disposición de sus clientes más de 250 metros cuadrados dedicados a la droguería, perfumería, bellas artes, restauración, pintura o ferretería.
Regentada por la cuarta generación de empresarios, la droguería Aniano ha emprendido este nuevo cambio con el objetivo de crecer. Así lo explica Maite Viloria, profesional con varias décadas de experiencia en el sector, que junto a su marido, Jesús Losada, dirige esta pyme que da empleo a tres familias.
“Hemos estado trabajando casi un año en el cambio, no ha sido fácil, pero estamos contentos con la acogida inicial. Hemos afrontado esta inversión con las miras puestas en seguir creciendo y los objetivos se están cumpliendo poco a poco”, argumenta.
Dicha decisión, trasladarse a una nueva tienda con grandes escaparates y espacio está siendo respaldada por sus clientes. “Hemos apostado por esta nueva localización donde podemos mostrar toda la variedad de productos que ya contábamos. Nuestros clientes están asombrados y muestran curiosidad por lo que tenemos”.
Este negocio histórico busca ofrecer una solución para cada cliente, a través de un asesoramiento y trato diferencial. “Nuestros clientes valoran mucho nuestro servicio y el gran surtido de productos, algunos de ellos que no existen en ningún otro lugar de Salamanca”, recuerda Viloria.
Además de su especialización en pintura, manualidades y bellas artes, Aniano ha ampliado su nicho de negocio a la ferretería. “Estamos en el centro de la ciudad y en esta zona no existían negocios de ferretería, salvo en las afueras. Los clientes nos demandaban desde hace tiempo este tipo de productos y queremos convertirnos en la ferretería de referencia en la ciudad”.
Su tradicional vinculación con el cliente, también se extiende a la venta a empresas que confían en su profesionalidad para surtir de productos con los que llevar a cabo su trabajo diario. “Tenemos una amplia cartera de clientes entre los que se encuentran hospitales, residencias, hoteles o empresas de limpieza. Es una parte importante del negocio junto a la venta a particulares”, puntualiza.
La larga trayectoria de 100 años acumulada por Aniano es, además de un orgullo, un estímulo para ofrecer el mejor servicio. “Trabajamos a diario para que Aniano siga siendo sinónimo de trato especializado, variedad y buen precio”, opina su gerente.
Picha aquí si quieres descargar las imágenes de la Droguería Aninano.