Tecnología de simulación vial al servicio de la seguridad al volante

Muchos de nosotros no podríamos imaginar nuestra vida cotidiana sin estar a los mandos de un vehículo. Conducir se ha convertido en un hábito diario para unos, semanal para otros. Dentro del tiempo que pasamos conduciendo, las reglas de la seguridad vial siempre están ahí, fundamentales para asegurar nuestros trayectos y ordenar el caos en el que se convierte el tráfico de cualquier ciudad.

Los españoles no suelen tener en cuenta la Seguridad Vial cuando conducen, según Teresa Martín, formadora de conductores desde hace más de dos décadas. “La mayoría de las personas que circulan son malos conductores. El mayor problema es la falta de cumplimiento de las normas de tráfico, porque sólo se aplican cuando están cerca la Policía o la Guardia Civil”, lamenta.

Normas que, a juicio de Martín, tampoco se cumplen fuera de nuestro país. “Si en España la formación vial es muy baja, en los países de origen de los alumnos es prácticamente nula”, destaca, antes de subrayar la importancia de realizar estos seminarios porque “ayudan a salvar vidas”. En este, más concretamente, se intenta concienciar de la aplicación de las reglas de la seguridad vial, explicando “los factores de riesgo que existen en los accidentes de tráfico, la seguridad activa y pasiva, junto a la conducción en condiciones climatológicas adversas”, detalla.

Alumnos partipantes en el seminario de Seguridad Vial para inmigrantes.
Alumnos asistentes al seminario de Seguridad Vial dirigido a inmigrantes, impartido en CONFAES.

Con el fin de sensibilizar de la importancia de esta disciplina, evitar accidentes y mejorar la empleabilidad de los participantes, la Confederación de Organizaciones de Empresarios Salmantinos, CONFAES, ha organizado un seminario de Seguridad Vial dirigido a inmigrantes, dentro del Plan de Acción para la integración social y laboral de la población inmigrante y emigrante, financiado por la Junta de Castilla y León.

Tecnología al servicio de la formación

Para que los alumnos sepan llevar a la práctica todos los temas que anteriormente se han enumerado, es necesario que además de conocer la teoría, dominen la práctica. Este seminario quiere hacerlo posible, utilizando la última tecnología adaptada a la formación de conductores. Un simulador que cuenta con todos los componentes de un vehículo común: cinturones de seguridad, salpicadero, intermitentes, limpiaparabrisas, palanca de cambios, freno de mano o llave de contacto y que, también, es capaz de simular cualquier situación al volante: conducción en ciudad, vías rápidas o en condiciones meteorológicas adversas como niebla, hielo o nieve en la carretera, etc.

Teresa Martín, formadora de conductores, da indicaciones a una alumna preparada para utilizar el simulador de conducción.
Teresa Martín da las últimas explicaciones a una alumna que se dispone a utilizar el simulador de conducción.

Asimismo, Teresa Martín ha querido incidir en la peligrosidad que tiene conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas, una práctica todavía común entre los más jóvenes. “Se trata de una práctica todavía muy extendida entre los conductores hasta 35 años, según lo que indican las estadísticas de accidentes”, destaca. Para ello, los alumnos han recurrido a unas gafas especiales que recrean estas circunstancias en distintos niveles, haciendo pruebas de equilibrio y precisión.

Evitar las prisas

Después de experimentar lo que sucede cuando se conduce un coche tras haber consumido cualquier cantidad de alcohol o de drogas, otro nuevo enemigo es el exceso de velocidad. Uno de los grandes errores que muchos cometen a los mandos de un vehículo inducidos por una situación de estrés. “El gran problema cuando se coge un coche, es que se hace con mucha prisa y las prisas para el tráfico no son buenas”, argumenta Martín.

En su opinión, muchas multan se evitarían si los conductores supieran prever los imprevistos. “Intentamos ganar en el coche los minutos que deberíamos ganar en otros momentos. Si sabemos que puede haber un atasco. ¿Por qué apuramos hasta el último minuto a salir de casa?”, se ha preguntado.

Una oportunidad para encontrar empleo

Una alumna realiza un ejercicio de equilibrio con las gafas simuladoras de alcohol en sangre.
Una alumna del seminario de Seguridad Vial realiza un ejercicio de equilibrio con las gafas simuladoras de alcohol en sangre.

El seminario de Seguridad Vial impartido en Confaes, no sólo quiere enseñar a cumplir las normas de circulación, también busca abrir las puertas a nuevas oportunidades profesionales a un colectivo tan atacado por la crisis como han sido los inmigrantes. Los participantes que lo han cursado consideran que es una buena oportunidad para actualizarse profesionalmente en la búsqueda del ansiado trabajo.

El joven marroquí, Ayoub, hace meses que se ha sacado el carnet con sólo 21 años. Ya ha concluido el curso en la autoescuela y sabe de la importancia de cumplir las normas cuando se está al volante. “Quiero conocer temas más avanzados sobre Seguridad Vial y poder resolver alguna duda con la que me quedé en la autoescuela. Tener el carnet es muy importante para mi futuro”.

En el caso del peruano Dionisio Donguerreroso, los nueve años que lleva en España le han servido para trabajar en diferentes profesiones y hasta sufrir un accidente laboral. Actualmente está desempleado. Al concluir este seminario, quiere conseguir de nuevo el trabajo que le arrebató la crisis. “Ya había hecho varios cursos en CONFAES y ahora me he apuntado al de Seguridad Vial para actualizarme. Tengo que estar al día para sacarme en un futuro el carnet. Con él, aumentarán mis posibilidades de conseguir un trabajo”.

Por su parte, la situación de Jhonny Vaca es similar a la de su compañero latinoamericano, este ecuatoriano que lleva residiendo en España trece años, ya se ha presentado a los exámenes de la Dirección General de Tráfico. “Hice hace dos años el curso de autoescuela, pero no conseguí sacar el carnet. He aprobado el examen teórico, pero no el práctico”. Al perder su trabajo, no pudo renovar la matrícula y ahora tiene que repetir todo el proceso desde el principio. Este curso, en sus palabras, le sirve para estar al día con vistas a volver a presentarse de nuevo en un futuro. “Quiero mantener el nivel que tuve en su momento, para que cuando tenga la posibilidad de empezar de nuevo a conseguir el carnet”.